sábado, 24 de mayo de 2014

Lágrimas de cocodrilo.

  Que el tiempo se quede en ayer; que no acaben nunca los besos que nos dimos; que seamos eternos; que tú mano camine junto a la mía por siempre.
  Que nunca me dejes por nada o por todo.
  Que estemos bien, tú y yo contra el mundo, juntos pero no revueltos.

  Y es que no quiero llorar más por ti; no quiero sentir más tu ausencia; no quiero andar por los rincones lamentándome por no haber hecho nada bien, por no haber sabido estar a la altura.
  No quiero estar haciéndome preguntas absurdas como si estarás pensando en mí o me echarás de menos; preguntas absurdas como si hablarás mal o bien de mí.

  Perdóname por no saber olvidarte.
  Perdóname por no querer olvidarte; pero a cada paso que doy te recuerdo; en cada suspiro estas tú preguntándome otra vez el porque de mi suspiro; en cada café que me tomo sola estás tú acompañándome, con tu capuchino con nata montada y canela; en cada risa que escucho están tus 'para por favor, no me hagas más cosquillas que no puedo respirar'; en cada abrazo que me dan quiero sentir tu cuerpo abrazándome, soportando todo el peso de mi cuerpo, de mi mente. 

  Y es que por más que lo intento no puedo sacarte de mi cabeza, no puedo olvidarte; porque a cada paso que doy veo momentos únicos a tu lado, veo la preocupación que tenias en el rostro siempre que me ocurría algo.
  Y es que echo de menos tus "ya he llegado a casa, amor"; tus te quiero; tus te amo; tus "eres lo mejor que me ha pasado en la vida".

  No sé que ha podido pasar estábamos tan bien... pero de repente, de un día para otro decidiste que estabas cansado de nuestra relación, que no te veías con fuerzas para seguir conmigo y...¿por qué? no lo sabías, quizá todavía no lo sepas, quizá me hayas mentido y sea justo por lo que me dijiste que no era. 
  Yo sólo quiero que sepas aunque no pueda ni mirarte a los ojos sin llorar, aunque cada vez que te vea tenga que darme media vuelta porque no soporto verte sin poder besarte, sin poder contarte lo que me ha pasado hoy, o simplemente por no poder mirarte igual que lo hacía antes; quiero que sepas que te amo y que yo sigo siendo tuya.
  Y sea lo que sea que te hayan contado, créeme cuando te digo que para mi fuiste y eres el único.

  Ojalá leas esto, porque quisiera decirte esto y más, pero no tengo la fuerza suficiente.  
-Pgn.
Light Orange Pointer